martes, enero 30, 2007

La señora Nawazish Ali


Noticias: La primera presentadora drag queen de Pakistán escandaliza a la tradicional sociedad islámica de Pakistán, 19 de Enero de 2007.
La primera presentadora 'drag queen' de Pakistán escandaliza a la tradicionalista sociedad islámica logrando audiencias récord con su programa. De día, vaqueros, camiseta y el corte de pelo de un joven seminarista. Al anochecer, tacones, maquillaje y un sari de seda. Ali Saleem se transforma cada sábado en la señora Nawazish Ali, se cuela en los salones de millones de paquistaníes y rompe todos los tabúes ante una de las audiencias más conservadoras del mundo.¿Cómo ha conseguido salirse con la suya? «Soy la inspiración de cualquier mujer y la fantasía de todo hombre», dice el primer travesti de la historia de la televisión de Pakistán para describir su secreto.Saleem se ha convertido en el escándalo nacional de la República Islámica y en un asunto de Estado para el Gobierno, que ha pedido su cabeza. El actor, hijo de un coronel del Ejército que se declara bisexual, ha esquivado la censura con lo que parece un caso de confusión nacional: quienes consideran que actúa de forma impropia para una mujer tienen que aceptar que, en realidad, es un hombre; quienes lo consideran un hombre amanerado y perdido acaban convencidos de que lo que ven en pantalla es una mujer.¿El resultado? Nadie quiere perderse Noche con la señora Nawazish Ali, el programa estrella de la televisión Aaj. El joven paquistaní, de 28 años, inició su carrera en el espectáculo imitando a Margaret Thatcher, la princesa Diana y la ex primera ministra Benazir Bhutto, hoy exiliada en Dubai. La liberalización de la televisión en 2002, con la aparición de decenas de nuevos canales, le dio la oportunidad de estrenar un programa propio y crear el personaje de Nawazish Ali, una viuda de mediana edad, labia envenenada e incontrolable pasión por el cotilleo. «Todo lo que he hecho es sacar la mujer que hay en mí», asegura Saleem sobre sus actuaciones. La picardía de la señora Ali hizo que en uno de sus últimos programas se hiciera acompañar por el político islámico conservador, Naimatullah Khan, y una provocadora supermodelo local.El primero de ellos saltó del sofá al escuchar a Saleem presentar el encuentro con un toque de erotismo: «Perfecto, ya tenemos el trío. ¡Qué bien lo vamos a pasar!»Los programas de Saleem, de una hora de duración, cuentan con diferentes invitados que son sometidos a mordaces cuestionarios en los que el entrevistador pregunta todo aquello que los paquistaníes siempre han querido saber pero nunca se atrevieron a preguntar. Por el plató han pasado en el último año deportistas, políticos e incluso líderes islámicos, que estos días repasan el Corán y debaten públicamente sobre si condenar a Saleem a la hoguera o seguir viendo su programa. La mayoría ha optado por la segunda opción.La drag queen de Karachi ha aprovechado su popularidad para lanzar un órdago e invitar a su espectáculo de los sábados al presidente Pervez Musharraf. El general ha respondido a la invitación amenazando con cancelar el programa, aunque parece menos preocupado por el travestismo del presentador que por lo que uno de sus portavoces ha descrito como un disfraz para atacar a su Gobierno con entrevistas en las que se habla abiertamente de democracia, de corrupción o del apoyo del general a Estados Unidos.El programa ha abierto un debate sobre hasta qué punto Pakistán es el país ultraconservador que refleja la prensa internacional. Mientras, el despacho de Saleem se ve inundado de peticiones de senadores y parlamentarios que quieren participar en el programa.La atracción de las clases conservadoras hacia Saleem ha alimentado el misterio de cómo un travesti ha logrado convertirse en una estrella en un país donde la homosexualidad es abiertamente rechazada y la comunidad gay vive en la clandestinidad. La señora Nawazish dice tener la respuesta. «Cuando estoy frente al espejo, me veo irresistible», asegura.

7 comentarios:

pon dijo...

La señora Nawazish Ali tiene un par de ovarios. Ya tiene valor en un país tan extremista salir así tan suelta, porque aunque parezca un asunto divertido y pintoresco lo cierto es que se juega el cuello cada vez que sale a la calle.
Lo que me parece más curioso es que bajo tanto fundamentalismo la gente está hasta las narices y se busca escapes como sea. No se puede vivir eternamente sojuzgado por la religión.
Gracias por tu artículo Sapiensis. muy interesante.

Homo-Sapiensis dijo...

Vamos...Ovarios, huevos y cojones... Y que lo digas POn... He visto vídeos de su programa y desde luego.... no se le entiende (aunque algunos programas los hace incluso en ingles, dependiendo del origen del invitado)pero se nota que su estilo rompe... Es admirable.

El "Dulzor de Ostras" dijo...

Ya era hora que tanta mascara se caigan. Soy, entre otras cosas, musulmán, gay y vivo con un judío. Así que sé de lo que escribo.

Volveré

Homo-Sapiensis dijo...

Dulzor un placer verte por aqui, despues de tiempo, a ver si has actualizado tu blog para visitarte. Y creo que eres un ejemplo de que las ideologías, creencias no tienen porque obstaculizar para nada las relaciones personales y humanas. un abrazo

hermes dijo...

Naturalmente atreverse a hacer eso en ese país es casi un suicidio, porque cualquier día muera apedreado, pero son esas personas con un par de narices las que ponen los cimientos para que una sociedad cambie, a veces a costa de su propia vida.
Un abrazo

Homo-Sapiensis dijo...

Hermes, me alegra verte por aqui... y en situaciones como estas es donde se demuestra la coherencia, la valentía y el coraje de una persona. Un abrazo

Hector Felipe Villamizar dijo...

En el mundo de los gay todos hacemos el amor!!! Jejeje interesante reseña y muy productiva, de verdad gracias por que desconocía de algunas cosas.